XV. Los mandados
Quise contarle algo muy especial que habia en los hogares cuando éramos pequeños. Nuestros padres y en general las personas mayores nos pedían que " hagamos mandados". Esta era un pedido muy práctico para la época y muy difundido. Era un favor que los padres nos pedían y que naturalmente los hijos lo hacíamos con gusto. El " mandado " que yo lo hacía todos los dias era comprar el pan y la leche en la tienda de la sra. Rosita. A las seis de la mañana ya estaba saliendo de casa, con una gabardina hermosa que mi padre me compró para este efecto, me quedaba un poco grande, para mí era un gusto ponerme y salir elegante para cumplir con el mandado. Llevaba una lista con las compras que necesitaba. Está lista de de llamaba "vale", firmada por mi papito era suficiente para que la sra. Rosita despache luego de alabar mi gabardina y mi alegre actitud de entrar y salir saludando. No era muy común que todos mis hermanos hagan los mandados, por lo que mi mamita decí...